La encuesta adelantada durante el mes de junio señala algunos resultados que son concluyentes en términos de impacto de las medidas, pero también revela el continuo esfuerzo de las empresas regionales por reacomodar su operación y mantener en lo posible sus niveles de generación de empleo y producción.

A pesar de que el 73,6% manifestó afectaciones por el confinamiento, se resalta que la gran mayoría contaba con protocolos desarrollados con anterioridad para enfrentar crisis, lo que es síntoma de una buena organización.

También se percibe optimismo en cuanto al tiempo de recuperación para volver a niveles normales de operación, la mayor parte de ellas asume que la economía volverá a su estado normal en el 2021.

Otro punto relevante es la capacidad de las empresas para asumir nuevos canales de comercialización de sus productos utilizando tecnologías de información y comunicaciones, el 53% afirmó haber tenido algún tipo de ingresos por esta clase de medios.

La inversión fue otro de los factores positivos dentro de las respuestas, el 70% de las empresas señaló que está dentro de sus planes realizar inversiones durante el segundo semestre de 2020 para mantener su actividad, en lo referente a: bioseguridad, call center, sitios web, innovación, y en menor medida en adquisición de maquinaria y compra de activos; situación que muestra el grado de confianza que existe hacia el ambiente de los negocios en la región en el mediano plazo.

Finalmente, se destaca la buena opinión por parte de los empresarios sobre las ayudas que el gobierno ha ofrecido a la actividad productiva. Resaltan los temas relacionados con arriendos de locales comerciales, exenciones y ampliación de pagos a ciertos impuestos, suspensión del cobro de peajes, subsidio a la prima, entre otros.

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